Psicoestimulación Está comprobado que las técnicas no farmacológicas
como la psicoestimulación cognoscitiva, a través de diferentes terapias que
incluyen terapia ocupacional, fisioterapia, musicoterapia, pintuterap¡a, rehabilitación
neuropsicologica, entre otras, retrasan considerablemente los efectos degenerativos
del mal de Alzheimer (estudio realizado en la residencia de personas mayores;
Leganes). Esta continua estimulación para el cerebro mostró que la enfermedad
evoluciona de manera mucho más dilatada en el tiempo, mostrando además que esta
estimulación mejora y mantiene las capacidades cognitivas, funcionales y habilidades
personales como el estado físico, social y motivacional, y es una manera de lograr
realmente una mejor calidad de vida para los enfermos y sus familias.
Prevención En la actualidad no
existen medidas de prevención ni tratamientos eficaces contra el Alzheimer. Sin
embargo, cuando se realiza un diagnóstico precoz, el control médico y psicológico
puede ser más efectivo, pues muchas enfermedades, y el Alzheimer no es la excepción,
responden mejor a los tratamientos cuando se diagnostican en sus etapas más tempranas.
Es importante estar prevenidos para los signos precoces de advertencia
que se pueden detectar con una prueba cognoscitiva mínima, para tener un punto
de referencia que alertará a los médicos en posteriores exámenes. Si no se pierde
el miedo a conocer lo que pueda pasar en nuestro cerebro con la edad, ¿cómo podremos
ayudarlo a mejorar? El conocimiento e información es el primer paso para
tomar las medidas y estrategias para combatir la enfermedad. La pérdida de memoria
y las deficiencias de funciones del cerebro no son normales; son una señal de
enfermedad, lesión o negligencia. Si piensa que usted mismo o algún familiar
presenta cambios de memoria o en el comportamiento, acuda a su médico lo más pronto
posible.
Gimnasia mental Mejorar
la memoria con técnicas sencillas y un adecuado estilo de vida beneficia nuestro
cerebro. No se limite a leer; escriba. No se limite a mirar el arte; pinte. No
se limite a escuchar; toque un instrumento.
Alzheimer
Gracias a los avances
en el campo de la medicina y las mejores condiciones de vida, cada vez el número
de personas que alcanza una edad avanzada es mayor y aunque todos soñamos con
llegar a una vejez saludable, todavía existen algunas dolencias que atacan a los
individuos mayores y para los cuales aún faltan años de investigación para encontrar
una verdadera cura. Una de ellas es la enfermedad de Alzheimer, afección que produce
una pérdida progresiva de la memoria y otras funciones intelectuales, así
como cambios en la personalidad y comportamiento. Esta
enfermedad hace parte de un grupo de padecimientos conocidos con el nombre de
demencias, las cuales tienen en común la pérdida paulatina de las funciones intelectuales
debido a la muerte de un gran número de células nerviosas, llamadas neuronas en
el cerebro. Desde
los primeros reportes realizados en 1906 por el médico alemán Alois
Alzheimer, los científicos han encontrado alrededor de estas células la
acumulación de una proteína anormal llamada beta amiloide, denominada así por
su apariencia similar a un almidón (cuando es observada en el microscopio), la
cual se dispone en estructuras conocidas como placas seniles. Hasta el momento
nadie conoce a ciencia cierta la causa de este depósito anormal, pero es claro
que dicha sustancia es tóxica para las neuronas y termina por destruirlas. Durante
este proceso, se acumula en el interior de las mismas otra proteína llamada TAU,
la cual también forma agregados que los médicos denominan ovillos neurofibrilares.
Solo cuando se sepan los mecanismos que los generan, podremos encontrar definitivamente
una curación real de esta enfermedad que está atacando a millones de personas
en el mundo. |