Dos o tres respiraciones profundas,
pueden ayudar a adquirir una posición serena
y aliviada, con esta sencilla técnica puedes
controlar estos estados psicológicos que en ocasiones
no puedes dominar.
Recomendaciones
en caso de ansiedad
Reconocer primero que el grado de tensión puede
afectarlo y producirle ansiedad, angustia
y finalmente depresión.
Debes estar motivado, para analizar y querer controlar
la ansiedad, así podrás llegar a conocer
la causa que genera ese estado de ansiedad.
Practicar ejercicios de "Control Mental",
es decir, aprender a respirar profundamente, así
tendrás bien oxigenado el cerebro.
Técnicas como la relajación física
y luego psíquica, como Yoga, Chi Kung, Meditación
Trascendental, entre otros, son favorables, para establecer
el equilibrio deseado, para estas técnicas se
requiere de un previo y correcto entrenamiento.
Antes de empezar con tranquilizantes y drogas antidepresoras,
trata de practicar ejercicios físicos cuya intensidad
y dedicación estén de acuerdo con tu capacidad
física.
El ejercicio más fácil de ejecutar es
el caminar pero si prefieres uno más activo "salta
la cuerda".
Motiva tu cuerpo al cambio, si tienes ciertos hábitos
que puedan perjudicar tu vida, definitivamente hay que
cambiarlos, ejemplo: excesos de cafeína, nicotina,
alcohol, entre otros, deben ser reemplazados por hábitos
saludables, obviamente esto requiere de un proceso que
exige de tiempo, ayuda y voluntad.
No olvidar que dormir lo suficiente y realizar actividades
recreacionales son muy importantes.
Si los problemas persisten, el médico será
tu mejor amigo y consejero para solucionarlos.
¡Ánimo,
es hora de enfrentar esos temores!