La gastritis
no es una moda, es un mal que lleva a otras enfermedades
de mayor complejidad. ¡Cuídate!

Si tienes un malestar que le está
afectando con cierta regularidad no
dude en consultar rápidamente al médico.
Por otro lado, si el dolor persiste olvida eso de automedicarte,
no puedes ocultar una enfermedad grave con pañitos
de agua tibia, no olvides: ¡consulta siempre a
tu médico!.
Por lo general, el diagnóstico de gastritis se
hace realizando una historia clínica detallada
en donde el paciente describe una sensación de
dolor abdominal localizada en la parte superior del
abdomen. Los procedimientos para el diagnóstico
de la gastritis pueden incluir los siguientes estudios:
Endoscopia o
Gastroscopia: el médico introduce un tubo
delgado con una cámara, llamado gastroscopio,
a través de la boca del paciente hasta el estómago
para examinar su estado. El médico busca indicios
de inflamación en o por el estómago, allí
puede tomar una muestra diminuta de la capa que cubre
el estómago, esta muestra se conoce con el nombre
de biopsia.
Exámenes
de sangre: sirven para medir el recuento de glóbulos
rojos de la sangre y posiblemente detectar anemia, cuando
no hay glóbulos rojos suficientes, puede causar
gastritis. Las pruebas serológicas sirven para
detectar la presencia de la infección.
¿Cuál es su tratamiento?
La mayoría de las veces y según el caso,
se recomienda un tratamiento basado en antibióticos
como el lasoprazol, pantropazol y el robretrazol; pero
lo importante es utilizar la prueba de aliento como
método para detectar la bacteria.
¿En
qué consiste la prueba de aliento?
Esta famosa prueba, consiste
en dar una cápsula a la persona afectada, esta
cápusla, contiene urea marcada con carbono, ella
se disuelve en diez minutos en el estómago y
posteriormente la ureasa que produce la bacteria desdobla
la urea en amonio y bicarbonato, después pasa
por la circulación a los pulmones y al final
es expedida por el aliento.
Antes de iniciar un tratamiento farmacológico,
se recomienda que cambies los factores que pueden estar
ocasionándote la gastritis.
El tratamiento farmacológico para la gastritis
lo debe de determinar su médico. Los medicamentos
utilizados para el tratamiento de la gastritis se clasifican
en:
Medicamentos que modifican la acidez del contenido gástrico
mediante la neutralización del ácido existente
como los antiácidos.
Medicamentos que bloquean la producción de ácido
del estómago.
Recuerda no auto-medicarte y no recurrir a el uso regular
de antiácidos
sin que el médico lo decida, él es la
única persona que puede recetarte un tratamiento
eficaz para combatir o controlar la gastritis.