Mítico corazón...

La relación de este órgano y la emoción es universal y común en nuestra cultura. Sentir el corazón en sus latidos más enérgicos, como también muchas emociones, hace que las personas superpongan o confundan las molestias cardíacas.

Por Hugo Hernán Zapata O.
Cardiólogo Pediatra - Centro Médico Imbanaco - Cali

En la tradición hindú, se cree que en el cuerpo existen muchos centros de energía, desde la cabeza hasta los pies, estos centros son llamados chakras. El cuarto chakra, a la altura del corazón, hacia abajo del cuarto chakra están los centros "inferiores", la sexualidad, las emociones, lo vegetativo, y hacia arriba, lo intelectual y lo puramente espiritual.

En una investigación lingüística sobre la palabra corazón, se deterimnó que
el término corazón significa saltador, como un ciervo que salta y corre. La conciencia más común que tenemos del corazón es que salta, sea con los esfuerzos o con las emociones.

Es común escuchar: "me saltó el corazón", "se me arranca el corazón" o "casi se me sale el corazón". En un libro de la tradición china, el I Ching dice que el corazón no se detiene nunca,
al igual que nuestro pensamiento, que busca, mira, siente, pero nunca -excepto cuando se muerte- para.

El hecho de sentir el corazón con sus latidos más enérgicos, también sentir muchas emociones como dolor, rabia, felicidad, hace que las personas superpongan o confundan las molestias propiamente cardíacas con las molestias o sensaciones provocadas por las emociones.

Esto lleva a muchas consultas médicas por opresiones, puntadas, quemazón, saltos, hormigueos en la región precordial, que hace que los pacientes se sientan enfermos.

Conozcamos más sobre nuestro preciado corazón:
El corazón abarcador
El corazón puede abarcar, unir cosas diferentes y distantes. Representa una condición de lo humano. Ante emociones de amor, de unión, podemos sentir en el pecho una expansión, una capacidad de unir, de contener a otro o a otros, dentro de nosotros; de poder tomar, en forma simultánea, rabia y alegría hacia alguna situación. Podemos ver al corazón como una vivencia de calor, de alimentación y protección. Existe la sensación de que se "deshace el corazón", se "abre el corazón", como una vivencia de apertura, de estar unidos, de pertenecer a todo, como si todos fuéramos lo mismo.

Dureza de corazón
Otra característica del ser humano, también puesta en el corazón, es la "dureza de corazón".
Se reconoce que la persona tiene capacidad de sentir, emocionar, reaccionar, pero si no lo hace, se "endurece". Sucede generalmente ante situaciones de rabia, venganza, dolor, miedo, como también por una apreciación racional. No recibimos al otro, no vibramos con lo que le sucede, no empatizamos con él, no hay resonancia, no hay energía, es allí cuando se dice: no hay corazón.

Espiritualidad
La espiritualidad es un soplo, un hálito vivo, una fuerza, una dirección o un sentido que impregna las cosas o nuestros actos llevándolos más allá de nosotros mismos; nos permite trascender, ir más allá de nuestro yo, hacia el otro, los otros, el mundo o el universo. Esta posibilidad interior de lo humano también se pone en el corazón.

La función de estos símbolos es despertar nuestra conciencia, enseñarnos, recordarnos, mostrarnos el significado de lo que sentimos y guiarnos en nuestro actuar. La perspectiva mitológica de este órgano lo ha llevado a ser el ícono de las emociones, las intuiciones y sobre todo del amor.

El corazón es considerado como un lugar de intensa
energía, vida, comprensión y movimiento...
... ¡no dudes en cuidarlo, quererlo y respetarlo!