El problema
Actualmente se considera que un hombre es demasiado rápido eyaculando cuando carece de control adecuado sobre su reflejo eyaculatorio.

Causas
Esta alteración puede tener su origen en experiencias sexuales anteriores vividas con ansiedad o premura, mastrubaciones con sentimientos de culpabilidad o baja frecuencia de las relaciones coitales, así como al iniciar relaciones con una nueva pareja. Alrededor del 25 por ciento de los hombres la padecen.

¿Cómo puede ayudarle su pareja?

Primera fase
Mejores posturas:
- Laterales, y la mujer en posición superior.
- La técnica de "parada y marcha" ofrece ejercicios sencillos para retrasar la eyaculación. Propónle que se concentre en sus sensaciones y que te avise cuando crea que está a punto de llegar al clímax.
- Realizar series de estimulación parando justo antes de la eyaculación. En los primeros ensayos la estimulación deberá ser manual.
- Detener la estimulación de uno a dos minutos hasta que descienda la excitación y reanudar la estimulación. Repetir estos ejercicios 3-4 veces, permitiéndole eyacular la última.

Segunda fase
La estimulación deberá producirse por contacto con las paredes internas de la vagina.

Tercera fase
Incremento de movimientos coitales.